sábado, 26 de octubre de 2013

El gato y la luna

Un gatito llamado Michifus estaba sentado en su tejado. Había perdido su juguete preferido; se encontraba preocupado porque no sabia como contárselo a su mama.
La luna que le observaba sonriente le dijo:
- Michifus, ¿ estas triste, que te pasa ?
El felino contó de la perdida de las bolitas de ping pong.
La luna le dijo:
- Mama sabe como eres tú y te comprenderá. Vamos, anímate ya tendrás unas bolas nuevas para jugar mucho.
Michifus, se alegro al oír las palabras de aliento de su amiga.
El gatito se despidió amablemente y salto del tejado.

Fue a hablar con mama, ella al oírle le contesto: - de ahora en adelante cuidaras mas tus cosas y que te sirva de experiencia; y que no se preocupara. Le abrazo muy fuerte demostrándole confianza. El gato feliz y ronroneando se fue a su cama de pompas que tanto le gustaba.
Allí espero los cuentos y nanas como todas las noches que mama lo contaba genial.
Al día siguiente, Michifus fue a agradecer los consejos a la luna. Desde aquel dia el gatito espera a su amiga sentadito en su tejado todas las noches.

1 comentario:

Datos personales

Me pasan cosas en mi pensamiento. Me entran ganas de escribir, asi de simple, no hay quien me este empujando a que lo haga. Solo se que debo hacerlo. Solo escribo y sigo escribiendo; solo aparecen las letras, es como si estuviera en un sueño placentero y relajante y que nada me debe despertar para que el sueño sea placido. Hay veces que faltan hojas o se acaban las tintas pero lo que quiero decir sigue adentro hasta que lo hago. Te sientes bien si dices lo que piensas y el papel te lo acepta y tu tinta sigue corriendo tras las palabras tan dulces , a veces tristes, grotescas, entre tantas cosas que decir... Veo en mi imaginacion reir a carcajadas a mi hermoso cuaderno.