Se trata de una florecilla muy delicada y deprimida. Estaba muy acostumbrada tomar agua a horas fijas. Era siempre mimada poco accesible a las miradas. Un día la florecilla mansa salio a buscar agua por su cuenta, porque el jardinero ya no estaba. Se presento un genio y le dijo:
-mira mi pequeña preciosura, eres mas protegido que oro en polvo; pero cierto día el aire te puede llevar.
La florecilla muy asustada regreso al lugar y lloro desconsoladamente por no ser fuerte como las demás plantas que resistían a las sequías. Desde aquel día soportaba mucho sol. sentía que se quemaba que ya no era vida seguir así; se marchitaba cada día mas hasta el punto que un día, era solo hojas pálidas; sus pétalos se habían secado. Ya no llamaba la atención de las que la querían; como a una flor hermosa que fue antes de la sequía y la aparición del genio malo.
Cuando estuvo a punto de morir, apareció volando un librito mágico que le regalo muchas palabras con roció de amor, que la hizo brotar y revivir.
La florecilla, floreció y creció hasta el cielo; sembrando semillas de paz y amor hasta la eternidad en el mundo entero.
Nunca desprecies al hombre por su físico, calificalo por lo que dice y hace en tu presencia.
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